Dice el autor: “En Efesios 4:20-24, Pablo nos insta a despojarnos del viejo hombre y a vestirnos del nuevo hombre. Despojarnos del viejo hombre significa lidiar con los patrones de pecado en nuestra vida. Vestirnos del nuevo hombre significa desarrollar cualidades como las de Cristo: amor, compasión, generosidad y perdón. En Pos de la Santidad se centra mayormente en despojarse del viejo hombre—lidiar con el pecado en nuestras vidas.”